Las tendencias en las poblaciones de camarón y cangrejos pueden ser buenos indicadores de la calidad y cantidad de hábitats adecuados, así como de la disponibilidad de alimento. En el boletín de calificaciones se analizan las poblaciones de cangrejo azul, dos especies de camarones (camarón marrón y camarón blanco) y las ostras. Las poblaciones de cangrejos azules en la Bahía de Galveston parecen estabilizados y obtuvieron una calificación de C, y los camarones blancos  se mantuvieron en B. En general, los crustáceos mejoraron y obtuvieron una calificación de C. Las poblaciones de ostras y los hábitats de arrecifes que estas crean, resultaron afectadas negativamente por el huracán Harvey en el 2017, la sequia del 2011, el huracán Ike en el 2008 y la presión de la industria pesquera. Sin embargo la población de ostras de la Bahía de Galveston recibió una C por cuarto año, indicando que esta población está estable.

Más de 100 especies de peces de aleta pueden encontrarse en el ecosistema de la Bahía de Galveston. Los peces de aleta también son considerados la base de la pesquería recreacional. Los estudios sobre peces de aleta indican que la mayoría de las poblaciones han sido constantes desde el año 2006, por lo cual los peces de aleta obtienen una C. Las poblaciones de diez especies analizadas se han mantenido, mientras que el seatrout de arena y la anchoa de bahía mejoraron de una C a una B y el spot disminuyó de una B a una C.

Para desarrollarse, las aves dependen de un hábitat de alta calidad para hacer sus nidos y alimentarse, lo cual las convierte en un indicador excelente sobre la salud de la Bahía. Después de casi extinguirse en los años 1960, la población de pelícanos pardos en la Bahía de Galveston se ha recuperado debido a una reducción en la utilización de pesticidas nocivos, tal como DDT. Desde el 2008, la mayoría de las poblaciones de aves se han mantenido constantes, por lo cual las aves obtienen una C. Este año, la garceta nival continuó mostrando una disminución moderada con un grado de D. La espátula rosada, la garza tricolor y la gaviota risueña mostraron una disminución moderada de la población, pasando de una C a una D.

Las especies exóticas son especies de plantas, animales y microorganismos que son transportadas a la cuenca de la Bahía de Galveston desde otras partes del mundo. Estas especies exóticas no evolucionaron en este lugar y, por tanto, no tienen los depredadores, parásitos y enfermedades que mantienen a sus poblaciones bajo control dentro de sus ámbitos naturales. Las especies exóticas se reconocen como invasoras cuando causan impactos negativos a nivel ecológico, social o económico en su nuevo hogar.

Las especies invasoras son nocivas para los sistemas naturales y algunas (como el mejillón cebra) son destructivas para la infraestructura. Con frecuencia, las especies invasoras son muy difíciles y costosas de controlar y pueden ocasionar daños en cosechas, pesquerías, hábitats como las praderas costeras, bosques y otros recursos naturales. Las plantas invasoras pueden congestionar los arroyos y las vías navegables y hacer que los incendios forestales ardan más fuerte, mientras que los peces invasores pueden cavar túneles en los arroyos, causando problemas en la calidad del agua.

Hasta el año 2021, más de 100 especies de plantas y animales invasores se han encontrado en la cuenca de la Bahía de Galveston. Los reportes de nuevas especies invasoras encontradas en la Bahía de Galveston desde el año 2005 continúan siendo bajas y ninguna especie invasora se ha establecido en la Bahía , por lo que la calificación es una B. Sin embargo, los ríos y bayous obtuvieron una calificación D dado que existen múltiples especies invasoras que se han establecido y están causando problemas en nuestras praderas de humedales, bosques y vías navegables. Las especies invasoras comúnmente encontradas en la región incluyen el jacinto de agua común, la alheña, el árbol de sebo, las hormigas rojas, el cerdo salvaje, el bagre cascarudo y el mejillón cebra, el cual se encontró en el lago Livingston en 2016. La mayoría (75%) de las especies invasoras encontradas en los alrededores de la Bahía de Galveston son plantas terrestres.